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Foro Prebendado de Tegueste

III Premio Prebendado

III Premio Prebendado

Foto: (Izquierda a Derecha): Elías López, Vicente Zapata, María Dolores Ramos y Liberata Pérez.

Palabras de clausura de Juan Rodríguez - Presidente del Foro Prebendado de Tegueste.

Como cada año, con la próxima llegada de las Fiestas Navideñas, son muchos los recuerdos, las ilusiones y, sobre todo, las esperanzas que se agolpan en nuestros corazones.

 Pero para todos los que componemos el Foro Prebendado de Tegueste, es más especial aún al vivir este acto, tan emotivo y de tan profundo y simbólico significado para nosotros. Continuamos sintiendo la satisfacción de poder evocar el camino trazado y recorrido por el Foro durante estos cuatro años de existencia. Un feliz caminar, lleno de afanes que en sus comienzos parecían irrealizables y que hoy son nuestros mejores cimientos para continuar tan apasionante tarea.

Agradezco la compañía con que nos honran y han honrado hoy personalidades y autoridades locales e insulares. Una gratitud que extiendo con especial cariño a quienes crearon esta Asociación, a los componentes del equipo de directivo que discretamente y apasionadamente han hecho posible lo alcanzado, a nuestros socios y colaboradores, y a cuantos se unen y comparten con nosotros el entusiasmo e ideales, porque ellos han alentado de manera decisiva, a lo largo de estos cuatro años, las tareas de nuestra entidad.

 

Pero si permiten quisiera destacar expresamente la misión y el trabajo eficaz de una persona, que ya no se encuentra dentro del Foro, pero que contamos fielmente con su colaboración y apoyo. Alfredo, muchas gracias.

 

Damos las gracias, también de modo especial, a quienes nos ayudan a hacer posible este acto. Al Ayuntamiento de esta Villa por sedernos las instalaciones de este destacado Centro Medio Ambiental de Pedro Álvarez, y a la Asociación de Empresarios de la Villa de Tegueste que con tanto cariño acogen nuestras iniciativas, y nos apoyan solidariamente siempre que se lo pedimos.

No puedo obviar, el agradecer profundamente y en nombre de todos los presentes, las palabras que han dedicado nuestras amigas, Ana Belén y María Dolores. Ambas han sabido transmitirnos desde el corazón, y con mucho cariño la valía de las personas que hoy reconocemos su labor.

 

Y sí…..ustedes dos como bien han dicho, escribir estas palabras han sido una gran responsabilidad, creo que nosotros debemos dentro de la emoción en la que nos han inundado, darles unas merecidas felicidades por su colaboración.

 

Me gustaría ahora dedicar en primer lugar unas palabras a nuestros primeros y nuevos socios honorarios, que conjuntamente con la Galardonada de esta III Edición son los verdaderos protagonistas de este acto.

 

Permitame hacer un alto en el camino en este discurso tan protocolario, como diría el compañero Gabriel. Y a todos los que nos acompañan les voy a transmitir una sensación admirable de Liberata y Elías. En la media noche de un día del mes de octubre, cuando ya comienza hacer frío, y cuando a cualquiera de los que estamos aquí solo nos apetece, estar metidos en casita junto al calor de la familia.

 

Unos locos del senderismo venidos de diferentes puntos de la isla, y también de fuera de ella. Se encuentran inmersos por una ruta nocturna por el casco de nuestro municipio, de repente ante sus ojos aparecen en el Chorro de la Placeta dos campesinos que acuden a ese lugar para abastecerse de agua, como antaño se hizo, provistos de los famosos “tirilines”, o bien realizando la carga del líquido elemento a la cabeza. Eso solo es posible gracias a Liberata y Elías, que se prestan a recrear esta escena, que año tras año los participantes en la ruta recuerdan y añoran poder volver a ver.

 

Entre las virtudes más importantes de Liberata y Elías, están las que se han transmitido en el ámbito familiar. El resto de actitudes o de conocimientos los ofrece el entorno educativo, la población donde se crece, pero las más fuertes son las de la familia. En el ambiente de la intimidad, donde no hay convencionalismos ni se trata de complacer a nadie, se trata de vivir y crecer como personas, donde lo más básico es la convivencia tener buenos maestros, es indispensable.

Sin conocer íntimamente a Liberata y a Elías pero si a uno de sus hijos, se advierte que esa transmisión de actitudes ha sido positiva, no sólo ha sido buena sino creativa, viva, ha sido capaz de crear un vinculo más allá del familiar y que lleva a que varias personas de la misma familia vivan el apego a las tradiciones,  a las señas de identidad.  Eso, de una manera tan profunda y arraigada, sólo se consigue en el ámbito familiar.

 

En una sociedad donde son más fuertes las influencias externas que las de la familia, en un espacio donde además el apego a lo tradicional ha venido emparejado en las últimas décadas por una falta de autoestima, el crecer con esos valores y haber sido capaces de transmitirlos a sus hijos nos habla de un matrimonio diferente, con las ideas claras, que han sabido respetar sus señas de identidad y se las han transmitido a sus hijos como un valor, que seguro les ha ayudado a consolidar su personalidad y su adecuación a su entorno.

 

En el caso que me corresponde, tratando a su hijo Alfredo, es fácil entender por qué su creatividad, su optimismo, el respeto que pone en las actividades de rescate etnográfico en las que interviene, y es que tiene como compañeros de faena a sus propios padres a Liberta y Elías, el mejor espejo donde mirarse para verse crecer como personas. Y hablando de crecer, aprovecho la oportunidad y como bien me ha soplado mi gente….

Hoy Belén lo nombraba, como hace uno años atrás un tal Manuel les hablaba de su próxima llegada a sus padres. Sí….. aunque les paresca mentira ese niño estaba dentro de la barriga de su madre, y ya podía mandarles notas a sus padres…… Ese niño que hoy esta con nosotros sigue muy cercano los pasos de su padre Vicente.

 

Y nunca mejor dicho lo de los pasos, porque Vicente esta sabiendo inculcar los grandes tesoros que tienen nuestros caminos, pero eso también nos lo ha infundido a nosotros y a todas las personas que hemos colaborado y arrimado el hombro junto a el, para que Tegueste, al día de hoy sea uno de los municipios de referencia en el senderismo temático, dentro y fuera de Tenerife.

 

Pero Vicente, nos hace sentir lo que hacemos,  sobre todo, sentimos la fortaleza, el animo, la constancia, talento y sinceridad. Hoy reconocemos su ganas de trabajar e implusar a seguir mejorando nuestro Tegueste, y le damos las gracias por su coherencia.

 

Si a Vicente le preguntaramos ¿Por qué Tegueste?. Creo que en primer lugar le encata nuestro municipio, la gente, los buenos amigos, el pueblo tranquilo, la cercanía a su lugar de trabajo, los pateos en familia, en fín,  TEGUESTE PARA EL, ES ESPECIAL. GRACIAS VICENTE.

 

Bueno cambiamos de tercio.

 

Albert Camus Premio Nobel de Literatura escribió: que existen personas más grandes,  auténticas y de corazón más hermosas que otras. Y forman a través del mundo una sociedad invisible muchas veces, que justifican el vivir de todos.

 

Esta tarde tengo el honor de poder ensalzar con mis palabras la vida y la obra de una de ellas, que ha recibido en esta edición nuestro galardón. Una teguestera de adopción que nos ofrece el ejemplo de su vida profesional y de altas cotas a las que puede llegar la constancia humana, cuando la guían valores como la dedicación, el admirable afán de superación,  y el férreo deseo de ayudar a los demás.

La fuerza de artesanas como María Dolores es un ejemplo, sobre todo para los más jóvenes, de la capacidad del ser humano para superar los más difíciles retos de los beneficios que conllevan el sacrificio y la abnegación, que, como ella, luchan por convertir en permanente éxito su compromiso por transmitir nuestra valiosa artesanía.

 

Pero no se es una gran artesana si no se está en posesión de otros valores, como los de la generosidad, el compañerismo y la nobleza. Nada es el triunfo en el dia a dia, si el trabajo no se comparte en beneficio de todos.  Hoy recordamos, para engrandecer aún más su labor artesanal, la entrega a los demás de María Dolores, que también reconocemos con este galardón. Sus gestos sociales son una faceta menos conocida, pero no menos valiosa, de nuestra premiada.

 

Si me permite María Dolores repito ante los presentes una frase que suele decir mucho usted y que simplifica su labor: “Con los elogios no se solucionan las cosas”. Pero permitame en el día de hoy, decirle que hoy estos elogíos que ha podido escuchar, han llegado a muchos corazones, sí…… a muchas personas valiosas en las que usted María Dolores se apoya  y con las que engrandece extraordinariamente su labor: Su esposo Rafael, su hijos Juan Lorenzo, Alajandro y María Inmaculada, sus nietos, que comparten su vida y su tiempo con el fin de ayudar y compartir.

 

Sus alumnas del Taller San Pancrasio y sus compañeros artesanos, que contribuyen y permiten que se materialicen estas ansias de entrega a los demás que caracteriza la labor de María Dolores.

 

Hoy hemos sido testigos en este centro de cómo el esfuerzo, la humidad, y el sacrificio, han dado sentido a las vidas de nuestros homenajeados. De ellos hemos aprendido a tener mentalidad abierta. Con ellos hemos sentido la fuerza transformadora de las ideas. Nos han contagiado la pasión por participar, la ilusión por ayudar.

 

Son valores e ideales a los que nunca debemos renunciar y que siempre nos deben inspirar. La ejemplariedad de María Dolores, Liberata, Elías y Vicente iluminan este sencillo acto. Tan cercanos en un mismo espiritu: Un espíritu de valentía, de superación y de cooperación. Todos ellos y nosotros, unidos en esta ceremonía, símbolo ya de la cultura, que, desde el Foro y con gran orgullo, ofrecemos a todos los teguesteros.

Muchas gracias.

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